Dayron vs Dayron

Guantánamo.- El ciclo olímpico cerró de manera inesperada para el campeón olímpico en Beijing 2008, de los 110 metros con vallas, el guantanamero Dayron Robles, quien decidió alejarse de las pistas, y solicitó la baja de la selección nacional.

Lesiones continuas,  sin medallas en el mundial de Daegu, Corea del Sur, y los Olímpicos de Londres, incomprensiones, y otras,  incidieron en la decisión de no competir más.

En honor a la verdad la mala fortuna acompañó al Lord del Guaso, sobre todo en los dos últimos años. La descalificación en la final de su especialidad en Corea del Sur, luego de ganar la carrera, resultó un duro golpe pues,  el título de campeón mundial al aire libre, es el que le falta en sus vitrinas.

Luego llegaron varios imponderables que le privaron de asistir a  unas cuantas competencias de nivel, con vistas a la participación en los Juegos Olímpicos. Así y todo salió a la pista de Londres, ganando todas las carreras previas a la final.

Sin embargo, no pudo materializar su objetivo de alcanzar una medalla de cualquier color en Londres, y luego de sobrepasar la quinta valla, se vio obligado abandonar la carrera por una lesión en una de sus piernas, y con ello se fueron a bolina todos los sueños y aspiraciones.

Al respecto se propagaron diversidad de comentarios mal intencionados, tanto en una parte de la afición cubana, como en algunos medios internacionales que trataron de denigrar la actuación del representante cubano, uno de los aspirantes a medallas en las pasadas olimpiadas.

No obstante, las pruebas médicas corroboraron que Dayron  sufrió una ruptura leve (grado 2) de la porción larga del bíceps femoral derecho y distensión en la zona central del recto femoral derecho (grado 1).

Aunque las informaciones relacionadas con la decisión de Dayron  fueron confirmadas por la dirección nacional del Deporte Rey, esperamos que en algunos meses pueda cambiar su estado anímico, y decidirse a regresar a las pistas.

A sus 26 años tiene mucho por aportar en eventos nacionales e internacionales, para demostrarle al mundo su grandeza y sencillez. A pesar de todo, Dayron es un hijo humilde de esta tierra oriental, y todavía tiene tiempo para reflexionar.