Frank Ribery manda
en las apuestas y en los pronósticos.
Cristiano Ronaldo
ordena y dispone sobre el terreno de juego. Son los dos grandes aspirantes al
premio.
Lionel Messi
se puede considerar casi descartado de la lucha final por su irregular
rendimiento en los últimos meses, en parte como consecuencia de sus constantes
lesiones, que le apartan, incluso, ahora de los terrenos de juego hasta el año
próximo.
En esta edición del
FIFA
Balón de Oro, por
primera vez, habrá cinco futbolistas finalistas entre los 23 seleccionados.
Messi, Cristiano Ronaldo, Ribery e
Ibrahimovic parecen
candidatos seguros. La quinta plaza está abierta y Neymar,
Robben y
Lewandowski se
presentan como sus máximos pretendientes.
Los votantes, seleccionadores y capitanes de todas las Federaciones
afiliadas a la FIFA,
más los corresponsales de France Football en todo el universo-fútbol deberán
emitir su voto antes del 15 de noviembre, por lo que ni la repesca mundialista,
ni el Mundial de clubes tendrán influencia en el premio.
MARCA analiza hoy cinco razones por las que Cristiano Ronaldo ha hecho
méritos suficientes para hacerse merecedor del galardón, que ya ganó en 2008
siendo todavía jugador del
Manchester United.
1. Se trata de un premio individual, no colectivo
Las competiciones nacionales e internacionales reconocen los méritos
contraídos por los clubes; los premios individuales, como el FIFA Balón de Oro,
reconocen, valoran o deben evaluar las actuaciones personales de los
futbolistas a lo largo de todo el año y se contabiliza a caballo de dos
temporadas regulares: el final de una, en este caso 2012-13 y el principio de
la siguiente, 2013-14.
En este año natural ningún futbolista ha reunido los méritos y números
particulares de Cristiano: 53 partidos (46 con el
Real Madrid y 7 con
Portugal) y 62 goles (56
de blanco y 6 con la roja de su país).
Ribery, el otro gran candidato, atesora 47 partidos y 20 goles (39/15 con el
Bayern y 8/5 con
Francia).
Messi suma hasta el momento en lo que va de año 47 partidos (40 con el
Barça y 7 con
Argentina) y 45 tantos
(39 y 6).
2. Los títulos de los clubes no son históricamente claves
Las apuestas tienen al francés Frank Ribery como principal candidato al oro
porque son muchos los que consideran que los cuatro títulos ganados por el
jugador francés con el
Bayern de Munich:
Champions (sólo marca un gol), Bundesliga, Copa y Supercopa de Europa deben ser
definitivos para marcar la diferencia.
Sin embargo, hay precedentes bien recientes en la concesión de este premio,
en los que los títulos colectivos no han servido para decidir el trofeo. Por
ejemplo, en 2010, Messi fue primero en la clasificación por delante de Iniesta
(segundo) y Xavi (tercero) cuando los tres habían conseguido con el Barcelona
el mismo número de títulos y los dos jugadores españoles lucían un galardón
más: nada menos que un campeonato del mundo que no ganó el argentino.
Dos años después ocurrió algo parecido. Messi ganó por delante de Cristiano
Ronaldo (plata) e Iniesta (bronce) y Andrés había conquistado, también, un
trofeo más que Messi, la
Eurocopa
de
Ucrania y
Polonia con
España.
Estos dos ejemplos dejan en evidencia que los títulos colectivos no siempre
han marcado las preferencias del jurado.
3. Rendimiento e influencia en el juego del equipo
Ajustándonos a esa batalla directa que se avecina entre Cristiano y Ribery,
el portugués ha demostrado, sobre todo en la segunda parte del año, un
rendimiento individual superior al del francés y también una mayor influencia
en el juego colectivo de sus respectivos conjuntos.
El rendimiento de Cristiano es mucho más trascendente para el Madrid que el
de Ribery para el Bayern. Ambas premisas se comprueban fácilmente con los partidos
que disputan y los goles que marcan uno y otro.
Cristiano es indiscutible e indispensable en su equipo, siendo el máximo
protagonista en casi todos los encuentros y Ribery ha tenido sus lagunas en el
Bayern, no siendo titular en algunos encuentros.
4. Misma posición en el campo pero distinta efectividad
Los dos jugadores tienen la misma posición en el campo. Ambos tienen su zona
de partida en la banda izquierda, pero con libertad para moverse por todo el
frente del ataque. Cristiano explota mucho más esa libertad de acción que
Ribery. Sus formas de llegar al gol le califican como el delantero total.
De los 56 tantos que ha marcado en lo que va de 2013 con el Real Madrid, 33
han sido con la pierna derecha, 13 con la izquierda y 10 con la cabeza. Más
completa es aún la forma en las que ha conseguido estos goles. A saber: cuatro
de falta directa, uno de falta indirecta, tres de remate después del
lanzamiento de faltas, nueve de penalti, cuatro de remate a la salida de un
córner, 30 en jugadas colectivas y cinco en acciones individuales.
5. Cristiano vive una progresión constante
La progresión de Cristiano desde su llegada al Real Madrid es constante.
Ejemplo: llegó al Bernabéu con 16 goles en sus seis temporadas de Champions con
el Manchester United y aquí ya ha conseguido 43 en cuatro temporadas y cuatro
partidos.
En los tres últimos años, ha llegado o superado los 60 goles. En 2011: 60
partidos, 60 tantos. En 2012, 71 encuentros y 63 dianas. Ribery, en 2011, en 50
partidos marcó 15 tantos y en 2012, 60/16.
La influencia en la votación de su rendimiento y resultados con sus
respectivas selecciones debe ser nula. Tanto Portugal como Francia tienen que
disputar la repesca mundialista durante los próximos días.